Tonteras

Había terminado de ilusionarme, o eso creía.

Tras mucho tiempo, solo bastó una mirada, un hola y una sonrisa, para caer en las ilusiones una vez más. Creo que alguien en algún momento me dijo que pecaba de iluso. De soñador. No le tomé el peso en ese momento pero tras años conociéndome, me parecen palabras muy ciertas.

Cuando vi esa sonrisa. Tímida y ligeramente coqueta, algo se revolvió en mi interior. No lo niego. Soy coqueto por naturaleza, y no es algo que intente evitar. Me gusta ser así y eso es algo que no cambiaría. Pero esa mirada tenía un tipo de coquetería al que no estoy acostumbrado. Aquella coquetería que dice más de "tú nunca podrás estar conmigo" que "esto es un juego, no te lo tomes en serio". También me han dicho que me gusta complicarme la vida. Es verdad. Y hay desafíos que no dejo pasar.

¿Suena feo decir que eres un desafío? A mi parecer si. Pero las palabras dan para tanto y existen tan pocas para expresar todo lo que necesitamos decir. Mi vida entera es un desafío del que trato de salir victorioso (no confundir con que no moriré. Puedo salir victorioso de la vida incluso estando muerto...). Aún así. ¿Cómo actuarías tú ante una mirada que te diga "no podrás tenerme", ante una sonrisa que se te insinúe provocadora y distante?. ¡Sí! lo más sencillo sería simplemente aceptarlo y dejarse estar. Pero si mal no recuerdo dije más arriba que me gustaba complicarme la vida (y no lo digo como algo irónico/sarcástico).

Y esa mirada que encanta y enamora, se confabula con la timidez de la sonrisa y lo engreído de su caminar. Una mezcla extraña sin dudas. Me hacen dudar. Tantas cosas y tan pocas. Todos mis sentimientos se transforman de un instante a otro en deseo, amor, en rabia, distancia y un largo etcétera que aburriría a cualquiera... incluso a mi. Si, incluso a mi.

Una vez me preguntaron "quien te entiende"... y no supe que responder. Hoy día sé que yo me entiendo, y eso me basta para vivir. Pero no quita que...

Leave a Reply