Bajo la Luz de la Luna

Tantas cosas que tienen un nombre... y q no vale la pena nombrarlas...

- ¡Qué bella tarde! - dijo alguien en ese helado dia de invierno.

Un perro, ya familiar para los transeuntes, jugaba a perseguir los vehiculos que por allí pasaban, saltando y ladrando a todas partes como si no tuvieran anda que hacer...

- ¡Y dicen que la vida de perro es la peor! - penso él, mientras observaba los continuos movimientos del animal.

Se encontraba sentado en una de las bancas de madera pintada de color verde y algo desgastada por las lluvias y el sol, ademas, a esas alturas ya nadie las ocupaba por lo que nunca se dedicaron a repararlas.

El parque se encontraba en medio de una zona residencial, a las afueras de la capital, aunque uno de sus lados daba a la avenida principal, que dividia el sector entre el lado "bueno" y el "malo".

Siempre habia pensado el porque de esa definicion, que incluso encontraba absurda. Apuesto, se atrevio a decir en un momento, que la gente del lado "bueno" es más mala que la del lado "malo". Nunca nadie se atrevio a refutarlo, porque lo conocian lo suficientemente bien como para creer que siempre decia las cosas cuando ya tenia pruebas de su veracidad. Y él sabía que ellos lo creian. Por eso nunca investigo. Pero exceptuando aquella ocasion, nunca aseveraba nada sin tener pruebas tangibles de ello, y por eso llego lejos; tan lejos como nunca creyo lograrlo.

Pero en fin..., resulta extraño hablar objetivamente de allguien que durante toda tu vida fue a quien mas odiaste, y resultó que despues de su muerte, termina siendo tu mejor amigo, o por lo menos, a quien mejor comprendes; pero tengo toda una vida para contarlo... ya que por ello fui condenado a un encierro eterno...

Pero vayamos por orden...